Tucson, Arizona.- Uno de cinco sospechosos en el asesinato de un agente de la Patrulla Fronteriza solicitó al tribunal más tiempo antes del comienzo de su proceso judicial en Tucson. La muerte del oficial, en 2010, reveló una operación federal fallida para rastrear armas.
Jesús Leonel Sánchez Meza, también conocido como Lionel Portillo Meza, fue extraditado de México el mes pasado. Su juicio debía comenzar el 29 de julio, pero Sánchez solicitó más tiempo para considerar un posible acuerdo.
Sánchez es uno de cinco implicados en el asesinato del agente Brian Terry en el desierto de Arizona. Su muerte puso de manifiesto el fracaso de la operación Rápido y Furioso, de la Oficina de Alcohol, Tabaco, Armas de fuego y Explosivos, donde los agentes permitieron a delincuentes comprar miles de armas y después perdieron el rastro de muchas. Una de estas fue hallada en el lugar de la muerte de Terry.
